Hasta en el teletexto... hay que tragar merengue por un canuto Nos importan un carajo Calderón, Villar Mir, el voto por correo, la Bermúdez vestida y ya casi que sin vestir, Capello y el niñato de Raúl.
El cargamento está preparado. Hay una caja para "El Rondo". Para que Quique Guasch la mezcle con zumo de zanahoria y aftersún de copertone; para Juan Carlos Rivero, Roberto Gómez... para el greñúo ese, el ruso, que si no le gusta también tenemo lansaladillarrusa a la Kerzhakova.
Orténtica del estrecho, de San Fernando,

Este soy yo, con el cirio bien presentado a 60º. A mi madre no le era difícil reconocerme: la cruz_de_mi_antifaz no era oficial ni reglamentaria, me la hizo mi tía, costurera de la casa Singer, y la calcó de una tarta de Santiago... un verdadero do de pecho. Lo importante era que los bocadillos llegasen, que cuatro horas son muchas horas... Y llegaban... ¡Cómo eran esas bolsas que venían por Villasís!... todavía tengo grabada en la retina la imagen de esos donuts rosas never seen before que me trajo mi abuela un año y que jamás volví a ver... y es que mi abuela que vivía en La Hispano compraba en Santa Cecilia... ¡esa Casaesequié!...


